Woof Woof! comprame! (Priv Hinako)

Una vez me habían devuelto al mercado negro pues me habia portado mal con el esposo de mi dueña, pues era obvio que alguien como yo no podia permitirse ver como la golpeaban enfrente mio. Algunos dirán que soy un mal esclavo, pero mi dueña con lagrimas en los ojos me devolvió pues su marido la amenazo, pero ella sentía una gran lastima de dejarme en ese lugar otra vez, ella se había acostumbrado a mi lealtad y compañía todos los dias, pero a su esposo no le gustaba que hubiese alguien en la casa para defenderla.
Ante mi mala reputación mi precio bajo considerablemente y estaba esposado con largas cadenas y en una jaula, yo solo podía sentarme a esperar ahí con una sonrisa pues estaba claro la injusticia que había sido aquella historia en mi reputación como pet.
Suspire y de mi media saque un cigarrillo que tenia escondido por lo menos para poder pasar el rato, esperaba que aunque sea con mi precio alguien viniese a comprarme mientras esperaba en ese poso nuevamente.

Suspiro nuevamente y niego con la cabeza levemente. Intento replicar las palabras de mi padre pero al alzar la mirada veo que no deja espacio para reproches. Quiere que tenga compañía y nada más que eso. Me doy la vuelta con toda la dignidad que poseo y espero a que él me indique el momento de ir a la tienda.

«Comprar mi compañía—me digo. No me gusta nada esta situación, ya que tengo a mi lado a las personas que más quiero y no quiero separarme de ellas. Padre me ha indicado que cuando compremos al esclavo iba a tener que acompañarme en todo momento—. No me gusta.»

Espero fuera del despacho, como se me ha indicado mientras Padre realiza algunas llamadas. Cuando lo veo salir por la puerta él me indica que lo he de acompañar. Sonrío sin alegría y me encamino junto con Padre hacia el lugar en el que se encuentra el que será mi acompañante.

Suspiro al llegar. Abro los ojos y sin decir ni una sola palabra me adentro en el lugar. Busco algo con la mirada. Padre me entrega un catálogo y escruto con la mirada cada una de las fotografías. Veo una fotografía a la que le han tachado el precio y se lo han bajado. Ladeo un poco la cabeza y señalo uno. Antes de que mi padre pueda refutar mi decisión tomo uno de los formularios y comienzo a rellenarlo bajo la atenta y fría mirada de mi padre.

Código:

Nombre del usuario (Amo):  Hinako Sawada
Nombre del usuario (Esclavo): Tatsumi Sankyo
Lugar de Compra: Lemon Land Shop (Tienda).
Fecha de Compra: 17 de Febrero
Residencia: http://lemon-land.foroactivo.mx/t244-residencia-sawada#1539
Tipo de Pago: Efectivo
Firma: Sawada Hinako~

Habia sido un dia bastante raro, en la mañana habian hecho una devolucion, la cual no supe como tomar, sin embargo crystal-sama estuvo alli para tomar la devolucion y al esclavo con cuidado.

Mas tarde habia llegado un señor con una chica joven, la cual era bastante hermosa, aunque este pensamiento me hizo sonrojar cuando le atendi buenos dias cliente-san nyan, en que le puedo servir? le dije, leyendo lo que escribia en el formulario tatsumi sankyo... De inmediato nyan! dije y fui a la zona donde se encontraba el lobo, mirandolo con algo de miedo ya que le suelo tener miedo a los lobos macho n-nyan, has sido v-vendido sankyo-san, su nueva dueña esta afuera... Y no te preocupes, quizas estos dueños sean mejores dije, recordando que era el quien habia sido devuelto, intentando animarlo

SELLO DE COMPRA

diviertanse :)

Vi al muchacho entrar a decirme que me habian comprando, creo que yo tambien estaba sorprendido al pensar que tan solo habia sido de vuelto esta mañana y ahora en el mismo dia estaba siendo comprado nuevamente.

Me pare y apague el cigarrillo, Gracias. Le dije al muchacho que por lo menos parecia tomarse con calma y bien. Cuando sali para donde estaba el mostrador observe a aquella refinada ama que debia ser mi nueva dueña, me acerque y note que su perfume era muy rico y me obligaba a mover la cola sin que yo quisiera.

-Hola soy Tatsumi, sera un placer estar bajo sus deseos mi ama. Le dije con una reverencia mientras esperaba una respuesta de ella o de su padre.

Sonrío de forma amigable mientras siento la reprobatoria mirada que mi padre me dirige. Me doy la vuelta para ver como él le lanza una mirada fulminante al muchacho de pelo azul que nos ha atendido. Escucho como sus pasos se pierden en la trastienda y espero de forma paciente a que salga, mirando fijamente el suelo.

Cuando vuelvo a escuchar pasos alzo la mirada y me encuentro con los ojos de mi padre, que lanzan una mirada de desprecio a mi espalda. Me doy media vuelta y ladeo un poco la cabeza al ver al que ya es mi acompañante.

Le lanzo una sonrisa alegre y escucho un carraspeo a mi espalda. Mi padre se acerca unos pasos, viro la cabeza para ver su rostro y descubro que todavía continúa con el mismo semblante.

—Tu único deber de aquí en adelante será proteger a mi hija —dice mi padre con voz dura y fuerte—. Deberás acompañarla allá a donde valla y no podrás despegarte de su lado nunca. Todo lo que ella desee deberás dárselo, sin réplicas, o serás castigado duramente. ¿Entendido?

Sin esperar respuesta por parte de Tatsumi mi padre se da la vuelta y comienza a caminar, saliendo de la tienda. Vuelvo mi mirada a Tatsumi y niego con la cabeza mientras le mando una sonrisa amistosa. Rápido, casi sin dar tiempo de reacción, me acerco a él y me pongo de puntillas.

—Encantada de conocerte, Tatsumi-kun —susurro cerca de su oído para que mi padre no me escuche. Me coloco como antes y vuelvo a sonreir— ¿Necesitas algo? Estoy segura de que Padre comprará lo que necesites.

No entendía la reacción del padre al verme, ¿Acaso no sabia que yo era un Ookami y prácticamente era pura lealtad?.
Por lo menos la señorita se mostró gentil y divertida con esa sonrisa amable y su comportamiento hacia mi, fue asi que cuando estuvo cerca de mi y me hablo al oido no pude evitar un sonrojo en mi cara y mi cola que se volvia a mover, la cual atrape de inmediato con una mano para que se quedara quieta de una vez, Estoy bien, gracias señorita... ahora lo recordaba mejor y nadie me había dicho cual era el nombre de mi nueva ama, ummm... ¿ podría saber su nombre?, le pregunte algo timido pues me daba verguenza no conocer como se llamaba mi ama.
¿Asi que ella seria mi nueva ama?, la que deberia servir y consentir como ella lo deseara. Pues es bonita y parece una persona dulce, creo que voy a estar bien con ella.

Sonrío mientras asiento. Abro los ojos y ladeo un poco la cabeza para admirar al chico que hay frente a mí. Mis mejillas se tiñen de rojo y la temperatura aumenta en ellas al darme cuenta de que lo estoy mirando fijamente desde muy cerca.

Me alejo rápidamente y sonrío nerviosa profiriendo un tímido “Lo siento”. Es en ese momento cuando escucho la voz de Padre que nos ordena seguirlo. Le lanzo otra sonrisa a Tatsumi.

—Me llamo Hinako Sawada—le digo en voz baja. Mis ojos viajan hacia el lugar en el que se encuentra mi padre y agrego—. Podrás llamarme como te apetezca cuando mi padre no esté delante.

Aspiro de forma rápida y alargo la mano con la intención de tomar la de Tatsumi y salir corriendo para quedar un poco detrás de Padre.

—¿Seguro que no necesitas nada? —le pregunto de nuevo entre susurros—. ¿Ni ropa?... ¿Ni nada? Padre podría comprarte lo que necesites.

Me sentía sorprendido por las actitudes de mi nueva ama, creo que va a ser divertido pasar el tiempo con ella, pues parecía muy cariñosa y dulce, aunque me parece que hay una historia nada buena entre ella y el padre.
Cuando me tomo la mano no dude de sujetarme de ella, como el Ookami que era me quedaría bastante cerca de ella todo el tiempo.
Pues creo que si, si. Mi panza comenzó a sonar mientras nos acercábamos al padre de ella, Oh... y comida también.
Entrelace los dedos de nuestras manos como si fueramos mas pareja que ama y esclavo.

Cuando siento sus dedos entrelazarse con los míos no dudo en darme la vuelta y mandarle una gran sonrisa. Cuando llegamos al lugar en el que Padre espera mi sonrisa desaparece casi al instante mientras él nos dirige una mirada reprobatoria. Parece que va a decir algo, pero se queda en silencio y se da la vuelta negando con la cabeza.

Cuando él se mete en el coche hago yo lo mismo, sonriendo e indicándole a mi nuevo amigo que entre conmigo. Me pongo el cinturón de seguridad y me recuesto hacia un lado, con la intención de colocar mi cabeza en su hombro.

Es cierto que hace pocos minutos que lo conocía, pero ya le había tomado mucha confianza. Sonrío nuevamente mientras mis ojos se fijan en los de Padre, que me mira a través del cristal retrovisor. Cierro los ojos y me abandono hasta que llegamos a casa.

Estaba seguro de que había algo de desagrado entre el padre y la niña, tal vez eso era lo que me incomodaba un poco para poder hablar y actuar, no quería hacer nada extraño y que me devolvieran otra vez. Aunque si el intentara hacerle algo a ella no se lo permitiría, eso es definitivo.

Hinako recostó su cabeza sobre mi hombro y yo la consentí apoyando mi mejilla sobre su cabello, debía admitir que ella olía bien.
Después de unos minutos de silencio, llegamos a la casa de ella, la cual pude observar desde la ventana del vehículo, ¿Es aqui?, pregunte curioso.

OFF: ¿Paso la escena a tu residencia?